domingo, 11 de octubre de 2020

#poesíasiempre/41

 FRANCISCO DE QUEVEDO


Soneto amoroso


  A fugitivas sombras doy abrazos;

en los sueños se cansa el alma mía;

paso luchando a solas noche y día

con un trasgo que traigo entre mis brazos.


   Cuando le quiero más ceñir con lazos,

y viendo mi sudor, se me desvía;

vuelvo con una fuerza a mi porfía,

y temas con amor me hacen pedazos.


   Voyme a vengar en una imagen vana

que no se aparta de los ojos míos;

búrlame, y de burlarme corre ufana.


   Empiézola a seguir, fáltanme bríos;

y como de alcanzarla tengo gana,

hago correr tras ella el llanto en ríos.




No hay comentarios:

Publicar un comentario