![]() |
Julio Romero de Torres- La Fuensanta, 1929 (Colección particular) |
Morena clara
Estrella de plata,
la que más reluce,
¿por qué me llevas
por este calvario
llenito de cruces?
Antonio Quintero y Pascual Guillén
Fuiste una anciana de diecisiete años
porque la vida supo salvarse en ti a sí misma.
Demasiado espigada para un tiempo de luto
tú ibas
a caballo
sobre el firmamento.
El animoso monte revienta de colores.
Ya casi es primavera.
¿Quién iba a imaginar que fuera a ser la última?
Desde su tornavoz, el apuntador dicta: Cuando se marchaba
no intentó mirarla
ni lanzó un quejío
ni le dijo adiós.
Tú sueñas con el sol sobre las tablas
como el brote comienza a bailar con el viento.
Es mayo y es España.
Mil novecientos treinta y seis el año.
Tu juventud escucha los aplausos caer
rescoldos de horizonte y manantial.
Pero ya las estrellas están brotando enfermas.
Han llegado a la era turbios hombres.
Gritan mucho y golpean los pies contra el camino.
Golondrinas sin alas, los niños dicen: ¡guerra!
Guerra, esa flor maligna
que brota solamente de los suelos muertos.
La noche que tendieron duró infinitos años.
Y tú, cieguecita sobre las tinieblas
a pasito lento.
No te dejaron ser
joven
ni actriz
ni libre.
Pero nunca lograron
hacerte maldecir tu limosna de vida
ni desclavarte a Dios del corazón
ni acallar tus susurros de inmortalidad.
Siempre tuviste diecisiete años
porque la vida nunca se resigna
y aun herida, marchita, apaleada
espera su ocasión
espera siempre
poder resucitar
morena
y
clara.
(De Matria, Ed. Visor Libros, 2018)
Carlos Cano - El día que nací yo (Antonio Quintero y Pascual Guillén)
No hay comentarios:
Publicar un comentario